Una maquinaria automatizada es un sistema que realiza los procesos de manera autónoma y automática. Para ello, utilizamos la robótica industrial y diferentes tecnologías industriales. Sus usos y aplicaciones abarcan una amplia variedad de sectores y cuentan con innumerables ventajas.
¿Qué son las máquinas automatizadas?
La automatización industrial es un sistema en el cual las tareas relacionadas con la producción se transmiten a elementos tecnológicos, en lugar de llevarse a cabo por operadores humanos. Este sistema tiene una parte operativa y una de mando. La operativa actúa de forma directa y se compone de los compresores, los captadores, los accionadores, etc. La de mando suele ser programable y funcionar de manera autónoma. Además, tiene comunicación con todo el conjunto del sistema automatizado.
Las máquinas automatizadas están relacionadas con el uso de software informáticos o robots. Con la automatización, mejoramos la productividad de las empresas de una amplia variedad de sectores. Por ejemplo, la lavandería industrial. Pero además de la mejora de la productividad, también se generan beneficios para la competitividad de la empresa y para la calidad de sus procesos. Al final, el objetivo más básico de los procesos automatizados es lograr la eficiencia.
¿Qué es un sistema automatizado?
Un sistema automatizado es aquel que, con la ayuda de un programa informático, crea unos procedimientos que hacen funcionar de forma autónoma un conjunto de componentes. La automatización se utiliza en provecho propio y facilita la eficiencia de cualquier tipo de proceso una vez que se implanta. Por eso, las máquinas automatizadas son cada vez más utilizadas en el sector industrial.
Tipos de tecnologías para la automatización industrial
Los tipos de tecnologías que se utilizan en la automatización industrial son esencialmente seis. La elección de una u otra depende del sector en el que la vayamos a utilizar y de las aplicaciones que le queramos dar.
Electricidad industrial
La electricidad industrial es empleada, sobre todo, en los aparatos eléctricos o en el sector de la iluminación, producción de máquinas, etc. Es decir, en los ámbitos en los que se utilizan aparatos de alta o media potencia. Se produce como resultado de la programación de procesos tecnológicos, al igual que toda la automatización industrial .
Neumática industrial
La neumática industrial es otro tipo maquinaria automatizada que utiliza una transmisión de energía, con la que se facilita el movimiento mecánico.
Comunicadores industriales
Los comunicadores industriales son utilizados en prácticamente todo el mundo por los fabricantes de máquinas o de dispositivos electrónicos. El principal motivo de su aplicación es la alta conectividad en red.
Autómatas programables
Un autómata está programado para procesos secuenciales, los cuales pueden controlarse en tiempo real. El concepto de autómata programable también se utiliza para hablar de los robots en la automatización industrial.
Robótica industrial
La robótica industrial es el proceso mediante el que se programan tres o más ejes. Con ellos, se controlan de forma autónoma los procesos industriales, los cuales se pueden volver a programar.
Oleohidráulica industrial
La oleohidráulica industrial se utiliza para la transmisión de movimientos y de potencia de forma automatizada. El control se lleva a cabo con alta precisión y, gracias a la elasticidad del aceite, así como a su capacidad de compresión, se mejora el rendimiento del sistema que se va a automatizar, a causa de la disminución del tiempo.
Aplicación y ejemplos de las máquinas automatizadas
La aplicación de la automatización industrial es de una enorme amplitud. Dentro del embalaje, que es uno de los sectores en los que la maquinaria automatizada resulta de mayor utilidad, podemos mejorar la competitividad gracias a su uso en fajadoras, retractiladoras, flejadoras, etc. Además, ahora la automatización ha ampliado sus aplicaciones y ya no supone un proceso disponible únicamente para las grandes empresas. Gracias al desarrollo de las máquinas automatizadas y a la innovación en el sector, la metodología está disponible para todo tipo de industrias.
La aplicación de las máquinas automáticas optimiza los procesos de embalaje. Para ello, tan solo es necesario saber cuáles son las necesidades reales del cliente, dimensionando a continuación la instalación para que sea acorde a la capacidad del procedimiento. Tras estas dos claves fundamentales para el uso de la automatización industrial de final de línea, se procederá a dimensionar los componentes de acumulación. Así, evitaremos que se frene el proceso de dicha línea. Igualmente, hay que tener en cuenta los aspectos necesarios para promover la salud laboral.
Ventajas de aplicar maquinaria automatizada
La automatización industrial ha supuesto todo un avance y ha proporcionado numerosos beneficios al sector. La primera ventaja de todas consiste en la optimización de procesos, así como en la mejora de todos los niveles de calidad. Por otro lado, al generarse una repetición permanente, se evitan fallos o alteraciones. Además al contar con una disponibilidad de 24 horas también se mejora la productividad, ya que el tiempo de producción es mucho menor.
Al estar automatizado el proceso, los costes son mucho más bajos, lo que es una indudable ventaja y una de las más importantes para las empresas, que notarán cómo adquieren una ventaja competitiva, ya que ofrecerán en menor tiempo unos productos de mayor calidad. Igualmente, la producción será mucho más flexible, ya que se podrá adaptar a las necesidades específicas de cada empresa y a sus requerimientos. Por último, otro de los beneficios fundamentales es que se mejora el flujo de datos gracias a que se mejoran las redes de comunicación. Las decisiones serán más precisas, de nuevo, en menor tiempo.
Como conclusión, la maquinaria automatizada está al alcance de empresas de todos los tamaños y sectores, con una fuerte presencia en el embalaje. En este post, hemos visto que la automatización conlleva un sinfín de beneficios, incluyendo la mejor productividad y los menores costes. Además, tiene aplicaciones muy variadas y, fundamentalmente, seis tipos de tecnologías que responden a las necesidades de cada empresa. No olvides pedir información a nuestros expertos si quieres automatizar tus líneas de producción relacionadas con el embalaje.