¿Cómo mejorar la seguridad en la empresa y el trabajo? A veces, se olvida este aspecto fundamental en todo negocio. Por eso, se hará un recordatorio sobre la importancia de la seguridad en el ámbito laboral. Para entender la seguridad en el trabajo, conviene recordar la definición de riesgo laboral según la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
Evaluación de factores de riesgo
Los riesgos son las posibilidades de que un trabajador sufra un daño en el desempeño de su profesión. Para mejorar la seguridad en el trabajo, es muy importante tener en cuenta la gravedad de los riesgos, su inminencia y el peligro.
- Para valorar la gravedad, habrá que considerar la severidad de los daños que podría producir el riesgo. Los encargados de aplicar las normas de prevención deberán priorizar las medidas sobre los riesgos más graves.
- La inminencia es la posibilidad de que un riesgo laboral grave se produzca próximamente y dañe la salud de los empleados.
- El peligro es un riesgo con altas probabilidades de producir un daño (que puede ser grave o no) en un periodo de tiempo corto. Hay que aprender a considerar los riesgos según estos tres conceptos.
¿Qué situaciones generan riesgos en una empresa?
- Forma incorrecta de trabajar. Recae directamente sobre el empleado. Si las acciones del trabajador lo ponen en peligro a él o a los demás, hay que corregirlas y proporcionar formación.
- Mal uso de los equipos o herramientas en mal estado. Algunos aparatos en mal estado pueden suponer un riesgo para la salud de los empleados. También, si los empleados no usan adecuadamente un equipo, pueden provocar situaciones de riesgo.
- Condiciones negativas del entorno. Son las condiciones perjudiciales para los trabajadores. Por ejemplo, cuando se trabaja en un espacio con agentes físicos, químicos o biológicos dañinos.
Cómo se puede mejorar la seguridad en el trabajo
El primer paso para mejorar la seguridad en la empresa es aprender a identificar los tipos y situaciones de riesgo y, dependiendo de tu sector, contar con un servicio técnico integral que minimice las probabilidades de trabajar en circunstancias peligrosas. Después, se puede pasar a aplicar diferentes estrategias de prevención.
Identificar los riesgos
Las situaciones de peligro o perjudiciales no son iguales en todas las profesiones. Por ejemplo, en una oficina, los riesgos están asociados al estrés, el dolor muscular, la postura forzada o la vista cansada. En una obra, el peligro estará en las alturas y en las cargas pesadas. Hay que identificar las situaciones de peligro en cada profesión.
Informar a los trabajadores
Todos los empleados tienen que conocer los peligros que conlleva su puesto y cómo minimizarlos. También los trabajadores deben estar perfectamente informados de sus derechos.
Actualización tecnológica del sector
Los avances tecnológicos no cesan y cada día aparecen nuevos equipos en cada sector profesional que mejoran la seguridad. La misión de los empresarios es estar al tanto de las novedades en su gremio y aplicarlas en su negocio. Los sistemas de seguridad han avanzado mucho y pueden garantizar la salud o incluso salvar la vida de las personas.
Formación
Todos los empleados deben recibir formación. Se les debe explicar cómo manipular los equipos, cómo desconectarlos, limpiarlos o hacer sus tareas diarias de la forma más segura. La formación debe ser periódica desde el comienzo y durante toda la vida laboral del trabajador. Hay que tener un especial cuidado con los trabajadores jóvenes, que son los que más accidentes laborales sufren debido a su inexperiencia.
Atención a los horarios y al estrés
Los riesgos no solo son físicos. En ocasiones, ciertos empleados tienen horarios a jornada partida o realizan horas extra. Si el horario de trabajo no les permite conciliar su vida familiar y social, los trabajadores pueden caer bajo el estrés o depresión. Es muy importante que los trabajadores descansen y que se siga rigurosamente la ley para establecer su horario de trabajo.
Enseñar al empleado a ser organizado
Está demostrado que cuanto más desorganizado está el material, más situaciones de riesgo se dan. El material desorganizado provoca que las tareas se completen más lentamente (lo que desencadena estrés) y propicia los tropiezos y accidentes. Hay que concienciar a las personas de que ordenen su lugar de trabajo.
Mantener la limpieza
La higiene es tan importante como el orden. Un entorno de trabajo sucio sólo traerá problemas de salud que provocarán la baja de los trabajadores.
Cuidar la salud emocional
Evitar el estrés, las ausencias, la depresión o el abandono de los puestos es posible si se aplican las técnicas de salud emocional adecuadas. En la medida en que sea posible, se ha de garantizar un ambiente laboral agradable, donde los compañeros y superiores estén felices.
Contar con las máquinas adecuadas y un buen asesoramiento técnico
Los distribuidores de las máquinas de la empresa son fundamentales para reducir el peligro en el trabajo. Se ha de contar con distribuidores profesionales, responsables y comprometidos con sus productos. Las máquinas deben ser de marcas de calidad. Además, la empresa que vende las máquinas ha de proporcionar una buena asistencia técnica y el mantenimiento preventivo regular para evitar los riesgos.
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