Al igual que ocurre en otros terrenos, el embalaje también ha sufrido transformaciones a lo largo del tiempo. Especialmente desde finales del siglo XIX y durante el siglo XX, se han sucedido diferentes tendencias del packaging influenciadas por las tendencias artísticas del momento, como el arte pop. Los colores llamativos o envoltorios originales, típicos de compañías como Coca-Cola o P&G, han tenido su importancia en la venta y expansión de estos productos.
Entre las tendencias en el embalaje en 2023, destaca la preocupación por el packaging sostenible. Debemos tener en cuenta la influencia de la normativa comunitaria en esta materia, que penaliza el uso del plástico en los envases, y el nuevo impuesto al plástico, que ha entrado en vigor el 1 de enero de 2023.
Tendencias en el embalaje para 2023
Aunque las cuestiones medioambientales y enfocadas a la sostenibilidad van a desempeñar un papel trascendental en el embalaje en 2023, hay otros aspectos que no debemos olvidar, como es el diseño. Vamos a ver las principales corrientes que van a determinar los embalajes del futuro.
Packaging sostenible
En los últimos años, se está incrementando el uso de este tipo de embalaje. Se opta por materiales que se puedan reciclar. Algunos de los compuestos reutilizables son el cartón, el vidrio, o los plásticos vegetales elaborados a partir del maíz, la soja o la fécula de patata.
En la misma línea, vemos que adquiere una gran importancia el envase biodegradable, esto es, que puede descomponerse de forma natural e inocua para el medio ambiente. Entre los materiales biodegradables podemos citar el poliácido láctico cristalizado o los compuestos a partir de la caña de azúcar. En 2023, encontraremos materiales 100% biodegradables en los envasados que van recubiertos con un film, especialmente en productos de la industria alimentaria.
Pero no solo el material define el packaging sostenible. El diseño también va a determinar este tipo de embalaje como, por ejemplo, el envasado monocapa. Este tipo de envase consiste en usar un solo revestimiento fabricado en un único material. El principal objetivo es evitar la generación de residuos innecesarios y facilitar la reutilización del producto.
Packaging reutilizable
Entendemos por envase reutilizable aquel que puede ser aprovechado para más de un uso a lo largo de su vida útil. Los sectores de la hostelería y la industria alimentaria han sido los primeros en potenciar este tipo de envases, pero, poco a poco, se van extendiendo a otros sectores. Además de reducir la huella de carbono y el impacto ambiental, este tipo de packaging favorece la imagen de una empresa como protectora del medioambiente. Algunas cajas y sobres de cartón son ejemplos que podríamos incluir en este tipo de embalaje.
Envases minimalistas
En cuanto al diseño, el embalaje sencillo y ligero va ganando terreno frente a otros más barrocos. En este sentido, se tiende a reducir el número de elementos que componen el envase, así como la cantidad de colores y texto. Con este tipo de envoltura, se transmite un aire de elegancia y sofisticación al consumidor, a la vez que se consigue un empaquetado más sencillo.
Uso de materiales compostables
Este tipo de materiales se caracterizan porque se descomponen mediante procesos puramente biológicos. Al degradarse, producen agua, CO2 o biomasa. Estas sustancias que se forman se denominan «compost», y su principal cualidad es que los residuos que generan son totalmente inocuos y pueden formar materia orgánica.
Actualmente, existen industrias que se dedican al compostaje de residuos. Algunos elementos que se encuentran en esta categoría son el aserrín, el café o determinadas frutas y verduras.
Presencia de símbolos de embalaje
Estos símbolos tienen como finalidad informar al consumidor, por ejemplo, respecto a dimensiones del paquete, instrucciones o símbolos que aluden a cualidades medioambientales. Es el caso de los símbolos que alertan sobre la peligrosidad del producto o su fragilidad. Pero también pueden informar sobre el carácter reciclable del embalaje o si el material es totalmente compostable. Por último, también encontramos símbolos que nos proporcionan información de utilidad sobre el material del que está hecho el envase. Darle al cliente estos datos, mejorará la impresión que tiene de nuestra marca.
Experiencias branding
Por branding entendemos aquella materia por la cual se define y se compone una determinada marca o producto. El objetivo final es que el potencial consumidor grabe en su recuerdo un cierto logo o una marca. Tenemos que tener en cuenta que el embalaje es el primer contacto que va a tener un consumidor con un determinado producto, por lo tanto, el envasado desempeña un papel esencial desde el punto de vista del marketing.
En esta línea, podemos destacar el auge que está tomando el packaging personalizado. Se trata de una práctica que conlleva bastantes ventajas, como una mayor fidelización de los clientes, potenciar la buena imagen de la compañía en los clientes y permitir a las empresas diferenciarse de sus competidores.
Rasgos del packaging en 2023: modernización, sostenibilidad y adaptación a las circunstancias socioeconómicas
Son varias las circunstancias que van a determinar cómo será el embalaje en 2023. La preocupación por el cuidado del medioambiente y el cumplimiento de los objetivos de la Agenda 2030 condicionan en gran parte los materiales a utilizar y la capacidad de reutilización del producto.
La tendencia general a consolidar un packaging sostenible se ve reforzada por el marco legal en el seno de la Unión Europea. El impuesto al plástico va a suponer que muchos de los envases que hasta ahora se fabricaban con este material, sean sustituidos por envases elaborados con elementos compostables, reutilizables o biodegradables. La cantidad a pagar dependerá de la cantidad de plástico utilizada para la elaboración del envase. Motivo por el cual las empresas comenzarán a evitar su uso.
Para minimizar el impacto de este nuevo impuesto, las administraciones públicas van a excluir los productos elaborados con plásticos reciclados. Se pretende ir erradicando poco a poco los productos plásticos de los embalajes. A grandes rasgos, estas son las principales tendencias del packaging que vamos a ver en el futuro más próximo.