El embalaje es fundamental para proteger tus envíos, independientemente de lo que incluyan. Y si se trata de muebles, todavía será más importante contar con el embalaje de muebles adecuado, pues nos garantiza que queda inmovilizado y evitamos problemas durante el transporte. El boom de la venta de mobiliario online o las exportaciones hace que el embalaje para muebles cobre una importancia todavía mayor. Es algo que escapa de las manos de los fabricantes, el punto del proceso que más incidencias acumula.
Hasta no hace mucho, los fabricantes vendían directamente al cliente. Se encargaban de contratar y controlar el transporte de los muebles, pero la situación ha cambiado y este control ya no existe. La respuesta al problema pasa por embalar y proteger correctamente los muebles. Ten en cuenta que hablamos de productos tan dispares como mesas, sillas, sofás y sillones, armarios, somieres o puertas, de modo que necesitamos el embalaje adecuado para cada mueble. Obviamente, lo que sirve para un somier no es aplicable a un sofá.
¿Cómo se empacan los muebles?
Vaya por delante que la mejor opción que tenemos es desmontar los muebles y enviarlos por piezas. Siempre que sea posible, hay que desmontar el mueble y embalar las piezas por separado. Se agrupan en cajas, las etiquetamos y las aseguramos en palés. Enviarlos por piezas tiene una doble ventaja: por una parte, son más fáciles de manipular; por otra, ocupan menos y el envío es más económico. Eso sí, tendrás que adjuntar las instrucciones de montaje en el envío.
Cuando no existe la posibilidad de desmontar por completo los muebles, tenemos que embalarlos con plástico y papel de burbujas, lo que nos ofrece un plus de protección. Aunque el desmontaje no sea completo, sí que podemos desmontar el mueble por partes. No olvides guardar los pomos y tornillos en bolsas con cierre zip. Protege las esquinas afiladas con espuma o papel de burbujas para que no produzcan daños con el movimiento y embala cada parte por separado. Te puedes servir de una envolvedora orbital.
Coloca las partes en cajas, dejando el mínimo espacio posible para reducir el movimiento, y una vez llenes la caja, séllala con cinta adhesiva y etiquétala. Otra opción es envolver la caja en papel film. No olvides indicar que son frágiles o que lado de la caja va arriba. Ya solo te quedará numerar las cajas y apilarlas en palés antes de proceder al envío a su destino final. En este último paso, procura distribuir el peso de forma equitativa y evita que haya partes que sobresalgan o cuelguen fuera del perímetro del palé. Las cintas de sujeción te ayudan a mantenerlas aseguradas.
Ventajas de las máquinas envolvedoras para el embalaje de muebles
Es fundamental evitar al máximo la entrada de aire en el embalaje. Y aquí entran en acción las envolvedoras. Podemos utilizar plástico para embalaje retráctil mediante estas máquinas, que nos ofrecen el mejor resultado. En el caso de las cargas largas como los muebles, por ejemplo, los sofás o las puertas, las envolvedoras orbitales se antojan como la opción más adecuada para proteger los muebles antes de su envío.
Lo que hacen estas máquinas es envolver el material mientras avanza horizontalmente sobre las mesas de rodillos en “V”. Esto permite que esté centrado en todo momento. Además, el avance puede ser automático mediante el sistema de tracción de rodillos engomados o motorizados. Este tipo de envolvedora tiene un sistema de tensión de film permanente para un correcto embalaje de muebles.
Entre las principales ventajas de trabajar con estas máquinas destaca que obtendrás un embalaje rápido, seguro… y eficiente. No podemos olvidar que el objetivo será proteger los muebles que vamos a enviar. La interacción de los operadores es mínima, reduciéndose el riesgo de accidente de las tareas manuales. Se automatiza el proceso, acelerándose a la vez que los operarios se exponen a menos riesgos.
La automatización del embalaje también supone una mejora en la productividad, lo que incluye un menor consumo del film estirable. A su vez, esto nos ofrece un embalaje más sostenible al reducir el consumo de plástico. Las máquinas se adaptan a nuestras necesidades, admitiendo todo tipo de cargas; y nos aseguramos de que el envío parte hacia su destino totalmente protegido y en la fecha acordada con el cliente.
Materiales utilizados en el embalaje para muebles
Ya sabes cómo embalar muebles, pero todavía no hemos hablado de los materiales. Es fundamental utilizar materiales de máxima calidad en el embalaje para muebles, tanto en el interior como en el exterior. Las espumas y el papel de burbujas protegen el interior del embalaje. Ya sea en las esquinas o para llenar huecos, son un clásico del embalaje. Eso sí, hay que utilizarlas con cabeza: no podemos añadir capas y capas.
El film con preestiro se usa principalmente para proteger la mercancía del exterior conseguiendo el mayor ahorro de film posible. Admite un estiraje superior al film estándar, siendo aplicado por envolvedoras con sistemas de preestiro. Se pueden llegar a obtener hasta 4 metros de 1 metro de film.
Otro material muy utilizado a la hora de embalar mobiliario son los separadores y posicionadores de cartón o polipropileno. Nos garantizan que cada mueble tiene su sitio en el interior de la caja, y limita el movimiento del mismo. Así, evitamos el impacto entre muebles o la fricción que puede acabar desgastando y dañando los muebles que enviamos.
Los embalajes apilables o plegables son la clave para aprovechar al máximo el espacio en nuestros envíos. Ya sabes que cuanto menos espacio haya en el interior, mejor: reducimos el riesgo de que se mueva la carga y aprovechamos cada envío al máximo. Para ello, podemos recurrir a embalajes plegables de cartón ondulado, de polipropileno o embalajes multimaterial. Las tres opciones son igual de válidas para enviar muebles de forma segura.
Ahora que ya sabes cómo embalar muebles, solo tienes que ponerlo en práctica. Contar con la ayuda de envolvedoras para el embalaje de muebles siempre es una decisión acertada. La inversión en la máquina se amortiza rápidamente, creando un entorno de trabajo más ágil y seguro. Y esto no es todo, los muebles llegarán a su destino en perfecto estado, reduciéndose las incidencias y problemas en el transporte. Algo que, sin lugar a dudas, todos tus clientes valorarán de forma muy positiva.
