Cualquier aspecto relacionado con un producto influirá en la experiencia del consumidor, para bien o para mal. No importa el ámbito, desde el sector textil hasta el sector hortofrutícola, los libros o los productos de electrónica; contar con los sistemas de embalaje adecuados es imprescindible para proteger un bien desde que lo enviamos hasta que llega al cliente. Conocer las diferentes soluciones de embalaje que ofrece el mercado es clave para que el producto llegue a su destino en las mejores condiciones.
Qué es un sistema de embalaje
Un sistema de embalaje es todo lo necesario en el proceso de acondicionamiento de productos para protegerlos en su manipulación, transporte y almacenamiento. Conviene resaltar que no es lo mismo que envase, pues al embalar la mercancía protegemos su calidad en esos procesos y el envase sirve para la presentación comercial de nuestros productos. De este modo, el embalaje protege la carga ante vibraciones o colisiones en el transporte, los efectos del frío y el calor, la lluvia o humedad, posibles caídas, apilamientos, etc.
Funciones del embalaje
- Proteger el producto es la primera de ellas, pero también es una forma de contenerlo y transportarlo de modo seguro.
- Otra de ellas es identificar la carga, tanto de cara al público como para los distribuidores.
- Aportar información sobre el contenido del paquete tanto a los trabajadores que tendrán que manipular los productos como a los compradores.
- Motivar la compra si la presentación es atractiva para el cliente.
Además, conviene hablar de tres niveles de embalaje. El nivel primario es similar al envase, pues es la presentación del producto de cara al usuario. En cambio, en el nivel secundario se incluyen uno o varios empaques primarios. Es decir, el primario es una caja que incluye una bolsa de cereales, y el secundario sería la caja que llega al supermercado con varios paquetes dentro. Finalmente, el nivel terciario agrupa los anteriores, por ejemplo, un palé de cajas o un contenedor para su transporte.
Qué debemos tener en cuenta antes de elegir un embalaje
Al valorar los diferentes tipos de embalajes disponibles, lo primero que deberíamos tener en cuenta es qué producto vamos a embalar. Cuestiones como el peso, el material del que están hechos o la forma que tiene nos harán elegir una u otra opción. El producto a embalar también determina el valor y fragilidad de la carga. A mayor valor y/o fragilidad, más protección necesitará.
Otro aspecto determinante es para qué embalamos el producto. No es lo mismo hacerlo para transporte que para almacenamiento. Hay materiales que protegen más la carga cuando viaja, mientras que otros son más cómodos para apilar paquetes. Lógicamente, el sistema de cierre puede afectar el contenido cerrado a largo plazo, y no podemos pasarlo por alto. Por último, está el uso de sistemas de embalaje retornables o no retornables. A largo plazo, los primeros son más económicos.
Tipos de sistemas de embalaje
A partir de todos estos aspectos, podremos elegir las soluciones de embalaje adecuadas para nuestra carga. Según el sector, se seguirán unos procesos y se elegirá una máquina u otra, ya que cada sistema tiene su idiosincrasia. A continuación detallamos cada uno de los sistemas de embalaje:
Envolvedoras
Enfajadoras
Las enfajadoras utilizan un material de sujeción realizado fundamentalmente en polietileno plastificado. Estas máquinas embalan, agrupan y aseguran todo tipo de artículos, en un material duradero, resistente y seguro para el transporte de cualquier carga o mercancía. Además, se pueden adaptar a diferentes dimensiones, formas y materiales.
Fajadoras
Las fajadoras embalan, agrupan y aseguran todo tipo de productos. Estas máquinas fajan con papel, plástico, film ecológico de una manera sencilla. Son de fácil uso, fajan de forma rápida, limpia y evitan marcas en el producto. Además, son muy eficaces ya que son capaces de fajar diversos productos de varias formas y con diferentes materiales.
Flejadoras
Las flejadoras son fáciles y cómodas de manejar, acordonan la mercancía en horizontal, vertical o al palet. Esta máquina sirve para fijar los bultos entre sí o al palet mediante el fleje. Lo que hace es compactar y acordonar el paquete con un fleje, cuyo material depende del de la mercancía y las necesidades de transporte. Garantiza la seguridad e integridad de los paquetes durante los procesos de carga y transporte. Son unas máquinas flexibles y rápidas, que responden a las necesidades de cualquier sector.
Retractiladoras
Hay cargas que exigen una protección especial, y una retractiladora permite un empaquetado termosellado, agrupado o de protección con film o película. El acabado es seguro y versátil, adaptándose a todo tipo de necesidades de producción. También se conocen como hornos de retracción, y las hay de diferentes tamaños y grados de automatización (incluso hay retractiladoras manuales).
Precintadoras
Las precintadoras son máquinas automáticas o semiautomáticas que permiten sellar todo tipo de cajas. El precinto o las cintas adhesivas se pueden personalizar, de modo que cada empresa pueda incluir todos los detalles que considere como, por ejemplo, su logotipo.
Deal II: soluciones de embalaje
En Deal II contamos con más de 35 años de experiencia trabajando con maquinaria de embalaje. Somos una de las mayores empresas del sector en nuestro país, y ofrecemos todo tipo de soluciones de embalaje, tanto venta como alquiler de maquinaria: fajadoras, flejadoras, envolvedoras, precintadoras o retractiladoras, a parte de los consumibles. Somos distribuidores de los fabricantes más prestigiosos, además de ser distribuidor oficial y en exclusiva de Bandall en España, una empresa líder en el sector del embalaje.
También distribuimos maquinaria de empresas como Mosca, Transpak, Noxon o Smipack; y nuestras soluciones se adaptan a todo tipo de sectores productivos: e-commerce, alimentación, artes gráficas, lavandería industrial, logística, farmacéutica… Además de la maquinaria adecuada para tus necesidades, ofrecemos un asesoramiento completo para elegir la máquina, tareas de mantenimiento y servicio técnico, tanto presencial como telefónico.
Como conclusión, los sistemas de embalaje son una herramienta clave en la protección de la carga. Según las necesidades que esta exija, habrá unos tipos de embalajes que se ajusten mejor a las características del producto. Conocer las diferentes opciones existentes es imprescindible para garantizar la protección de las mercancías. Como distribuidores, en Deal II ayudamos a nuestros clientes a elegir la mejor opción para el embalaje de sus productos.
